Los cuentos infantiles han hecho mucho bien a los niños en tanto que aportan fantasía, ilusión, esperanza, buen humor, magia e imaginación. Pero los cuentos infantiles también han hecho mucho daño a las féminas que han crecido con un concepto equivocado de sí mismas. Es decir, las chicas, han crecido en muchos casos, con la idea de encontrar a su príncipe azul, conocer a alguien especial, compartir la vida en común, vestir de blanco y pasar por el altar. Desde algunos cuentos, se lanza la imagen de la mujer de una persona desvalida e indefensa.
Pues bien, en pleno siglo XXI un cuento ha arrasado, por ello, queremos recomendarte su lectura: La cenicienta que no quería comer perdices, es como indica su propio término, un libro que contiene un mensaje muy instructivo y esperanzador puesto que ofrece la visión de las personas como autónomas e independientes. Eso no significa renunciar al amor, pero sí que es verdad que pensar que la felicidad solo se puede vivir en pareja es un auténtico drama.
Los niños del siglo XXI, por suerte, han crecido con unos valores diferentes. Películas como Rapunzel, muestran la imagen de la mujer como personas valientes, luchadoras e independientes, sin embargo, las cosas no han cambiado tanto en muchos casos porque muchos de estos cuentos siguen lanzando el amor como un ingrediente necesario y obligatorio en la vida de una persona.
Por ello, La Cenicienta que no quería comer perdices es un libro que podría considerarse todo un manifiesto de independencia y de rebeldía. Se trata de un libro que está ilustrado y es realmente bonito por tanto es muy visual para niños y también para adultos.
Se trata de un cuento que antes de ser editado en forma de libro, circuló por internet a través de correo electrónico, porque el éxito de este cuento fue muy potente. Ahora, todos aquellos que quieren comprar este libro pueden hacerlo porque está perfectamente editado y su presentación es realmente bonita y llamativa.
Más información: Casa del Libro