El tiempo pasa volando, a velocidad de vértigo y aunque hace muy poco tiempo que los niños iniciaron su etapa escolar, en breve, ya estaremos viviendo la magia de Halloween una fiesta que encanta a los más pequeños de la casa porque los niños se disfrazan y se convierten en monstruos.
La magia de la fiesta de Halloween está cada vez más cerca y ya estamos en un buen momento para empezar a pensar en posibles disfraces para los más pequeños de la casa. Los disfraces de Halloween plantean el debate entre la tradición y la modernidad puesto que el día 1 de noviembre se celebra el Día de Todos los Santos.
Halloween es una fiesta de influencia americana que cada vez ha ido creando más arraigo en España hasta el punto de que esta fiesta ya se celebra en muchos colegios de España. Y los más pequeños de la casa, ya no consideran Halloween como una fiesta prestada sino como una tradición más de sus pueblos y ciudades.
Los disfraces de Halloween siguen la tendencia de la temática del terror y del miedo, es decir, en esta época del año, dar sustos a los demás se suele convertir en una rutina divertida ya que la línea que separa el miedo de la diversión puede ser muy fina cuando se hace humor a partir del temor.
Halloween es una fiesta de diversión y conviene tomarla como tal para que los niños se sientan arropados en esta fecha. Por ello, es divertida la costumbre de elegir un disfraz. No siempre es necesario comprar un disfraz cuando el niño tiene la posibilidad de repetir alguno del año anterior.
Para ello, se pueden guardar los disfraces del hermano mayor para que los utilice el hermano menor. La cuenta atrás para Halloween 2013 ya ha comenzado porque la fiesta del terror ya está aquí.