Es habitual que cualquier madre o padre de familia ponga en la mochila de su hijo un paquete de Klenex antes de ir al colegio por la comodidad que supone para cualquier niño, poder tener pañuelos de papel, suaves para la piel, pero a la vez, cómodos y prácticos en tanto que se tiran después de su uso.
Pues bien, Kleenex cuida todos los detalles de una forma sorprendente por ello, ha lanzado su colección de invierno. De esta forma, los pañuelos de papel están contenidos en cajas que tienen una decoración típica de esta época del año, el invierno. Por ello, estás cajas de Kleenex no desentonan en tu casa dada esta decoración tan propia de las bajas temperaturas y de frío.
Estas cajas además, son totalmente cuidadosas con el medio ambiente puesto que son reciclables. Están hechas de fibras recicladas. Pero a su vez, el pañuelo también es perfecto puesto que los pañuelos están hechos con fibras ecológicas, biodegradables…
Los pañuelos de papel gustan mucho más a los niños que los de tela, porque son mucho más juveniles. Pero además, para los padres también es mucho más cómodo olvidarse de poner la lavadora con los pañuelos de tela utilizados.
En plena época de invierno, cuando los resfriados y los catarros se disparan, nada como estar a salvo de las bajas temperaturas gracias a un buen pañuelo de papel que tiene una gran calidad. La decoración de las cajas está decorada con motivos navideños como por ejemplo, bolas de nieve, ropa de abrigo, en definitiva, invierno en estado puro.
Lo mejor de los pañuelos Kleenex es la excelente relación calidad precio que ofrecen. Se trata de un bien que está al alcance de cualquier bolsillo, pero además, se trata de un producto de uso común para toda la familia puesto que cualquier miembro de la familia puede necesitar en un momento puntual un pañuelo. Incluso cuando no tiene catarro, para secarse las manos después de haber ido al baño en un servicio público.
Imagen: Familia y Mujer